septiembre 8, 2025
Alergias en otoño: cómo identificarlas y cuándo acudir al alergólogo
La llegada del otoño puede agravar síntomas respiratorios. Aprende a distinguir una alergia estacional de un simple resfriado y cuándo consultar con un especialista.
El otoño es una de las estaciones más complicadas para las personas con alergias. Aunque la primavera suele asociarse más comúnmente a las reacciones alérgicas, en esta época del año también hay un aumento de casos, especialmente relacionados con el moho, los ácaros y ciertos pólenes tardíos.
La Dra. Mª Josefa Pereira González, especialista en Alergología del Centro Médico Puerto, explica que muchos pacientes acuden a consulta con síntomas que confunden con un resfriado común: estornudos frecuentes, congestión nasal, picor en los ojos y lagrimeo. Sin embargo, cuando estos síntomas se repiten durante varios días o semanas, es probable que estemos ante una alergia estacional.
Los principales alérgenos del otoño incluyen los ácaros del polvo, especialmente en ambientes cerrados y húmedos, y los hongos y mohos que proliferan con la caída de las hojas. Además, en algunas zonas, hay pólenes que se mantienen activos hasta bien entrado noviembre.
Uno de los errores más comunes es automedicarse con antihistamínicos sin una evaluación previa. Esto puede aliviar temporalmente los síntomas, pero no resuelve el problema de fondo. «Es fundamental identificar exactamente qué está provocando la alergia para poder aplicar un tratamiento eficaz y personalizado», señala la doctora Pereira.
En consulta se realizan pruebas específicas de alergia, como el prick test o análisis de sangre para detectar IgE específicas. Una vez identificado el alérgeno, se puede pautar un tratamiento que va desde antihistamínicos hasta inmunoterapia (vacunas), según la gravedad del caso.
Además del tratamiento médico, es importante tomar medidas en casa: ventilar diariamente, utilizar fundas antiácaros en colchones y almohadas, evitar la acumulación de polvo y mantener los niveles de humedad controlados.
Si tus síntomas se repiten cada año por estas fechas, no lo dejes pasar. Acudir a un especialista puede mejorar tu calidad de vida y evitar complicaciones respiratorias a largo plazo.